Mansa Musa fue emperador de Mali en el siglo XIII y poseedor de una fortuna 5 veces la de Bill Gates. Obviamente, esta riqueza le permitía tener a su alcance cualquier bien material de su época. Sin embargo, una mera jaqueca podía dejarle postrado, al no existir siquiera las aspirinas para aliviarla. Y un viaje a La Meca le llevó dos largos años, cuando en la actualidad puede hacerse en apenas unas horas. Su ejemplo deja claro que la calidad de vida no sólo depende del dinero que tengas, sino también las oportunidades que existan de gastarlo.
- Todo
- >
- Gente
- >
- Personas ricas
- >
- Mansa Musa no vivía tan bien como nosotros